¡Dale un descanso a tu cerebro! / Jugar para impulsar la actividad física y la creatividad
por Amy Eisenmann Biografía & Helen Hadani, Ph.D. View Biografía
Amy tiene más de 10 años de experiencia como educadora de la primera infancia, tanto en el salón de clases como en el entorno del museo. En su puesto actual, se enfoca en el desarrollo profesional del personal, la evaluación del programa y el adiestramiento para el Bay Area Discovery Museum (BADM, por sus siglas en inglés). Anteriormente, pasó seis años dirigiendo iniciativas estratégicas de educación infantil en BADM y en un gran centro de ciencias en el Medio Oeste de los Estados Unidos. Fue maestra en el salón de clases, principalmente para preescolar, antes de trabajar en museos. Actualmente forma parte de la Comisión First 5 Marin y fue miembro fundador del Equipo de Liderazgo de la Association of Science and Technology Centers Early Childhood Community of Practice. Amy tiene una licenciatura en música y una maestría en educación infantil.
Como Directora de Investigación en el Bay Area Discovery Museum, Helen es autora de investigaciones noveles sobre el pensamiento creativo y el desarrollo infantil, incluyendo los papeles blancos ‘Inspiring a Generation to Create’, ‘Reimagining School Readiness’, y ‘Roots of STEM Success’. Helen lanzó y gestiona el laboratorio de investigación en la página web del BADM y está asociada con la Universidad de California en Berkeley y la Universidad de Stanford para llevar a cabo investigaciones empíricas sobre el desarrollo cognitivo, social y emocional, con un enfoque en la resolución creativa de problemas. Cuenta con más de 18 años de experiencia en entornos de investigación y educación, incluidos años en las industrias de la tecnología y el juguete llevando a cabo investigaciones con padres e hijos para desarrollar productos de aprendizaje innovadores en Hasbro, Apple, Leapfrog y LEGO. Helen recibió su doctorado en psicología del desarrollo en la Universidad de Stanford y ha enseñado en la Universidad de California en Davis y San Francisco State University.
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El marco CREATE:
A = Juego Activo
- ¡Pasa el mayor tiempo posible afuera! Estar afuera fomenta la actividad física y disminuye el riesgo de depresión y ansiedad. Utiliza espacios comunitarios como parques infantiles, playas, jardines o cualquier espacio público al aire libre.
- Cambia el cochecito por una bicicleta o scooter: ¡tu hijo adquirirá habilidades físicas importantes como el equilibrio y te sorprenderá lo rápido que aprende a moverse!
- Las habilidades motoras finas -- los músculos pequeños del cuerpo que se usan para escribir y agarrar un lápiz -- también son importantes. Rasgar cinta adhesiva, construir con bloques de Lego o trabajar con arcilla fortalece esos músculos.
- Ten en mente un par de espacios interiores o actividades para cuando el clima no esté bueno. Prueba una visita al museo, acuario o espacio de juegos para niños de tu localidad. En casa, puedes configurar una carrera de obstáculos con muebles pequeños, cinta adhesiva y almohadas.
Jugar y aprender van de la mano. Lo mismo puede decirse del ejercicio y el aprendizaje. El movimiento físico y el ejercicio no solo fortalecen nuestros cuerpos, sino que también mejoran el aprendizaje y aumentan la creatividad. Para los niños, esto es especialmente importante porque hay menos oportunidades para que estén activos tanto en la escuela como en el hogar, dada la reducción del tiempo de recreo en muchas escuelas y el acceso incremental y uso de los medios digitales.
La relación entre el estado físico y el rendimiento académico ha recibido una atención creciente como resultado del aumento dramático de niños con sobrepeso e incapacidad, y la presión sobre las escuelas para cumplir con estrictos estándares académicos. Un número creciente de estudios demuestra que el ejercicio está asociado con un mejor enfoque en los niños, así como con emociones positivas, memoria mejorada y una mayor capacidad de aprender a partir de los años de escuela primaria. Este conjunto de evidencia sugiere que las políticas escolares que eliminan el recreo o la educación física para hacer más tiempo para los temas académicos están equivocadas. Cabe destacar que las recomendaciones recientes de la Academia Estadounidense de Pediatría indican que el recreo juega un papel crucial y necesario en el desarrollo infantil. Lo que es bueno para el cuerpo también es bueno para el cerebro.
¿Cómo podrías incorporar descansos frecuentes de actividad? Una buena regla general es asegurarse de que los niños no estén sentados más de tres minutos por año de su edad; por lo tanto, un niño de cinco años debería tener una posibilidad de movimiento físico después de 15 minutos.
Un área de investigación relacionada pero más nueva indaga sobre la relación entre la actividad física y la creatividad. La sabiduría convencional sugiere que las personas creativas a veces se dedican a la actividad física para ayudar a superar los bloqueos mentales y hacer fluir sus jugos cognitivos. El famoso filósofo Henry David Thoreau describió este fenómeno elocuentemente cuando dijo: "En el momento en que mis piernas comienzan a moverse, mis pensamientos comienzan a fluir -- como si hubiera dado rienda suelta a la corriente en el extremo inferior y, en consecuencia, nuevas fuentes comenzaron a fluir en el superior."
La investigación actual, principalmente con adultos, sugiere que la actividad física a veces puede mejorar el pensamiento creativo. En una serie de experimentos, los investigadores hicieron que los estudiantes universitarios completaran un conjunto de tareas creativas, tanto tareas de pensamiento convergente como divergente, mientras estaban sentados o caminando en una caminadora o al aire libre. Las tareas de pensamiento convergente implican encontrar la solución única y óptima para un problema (por ejemplo, encontrar la respuesta correcta a un problema de opción múltiple), mientras que las tareas de pensamiento divergente requieren generar muchas soluciones posibles a un problema (por ejemplo, una lluvia de ideas). Los investigadores encontraron que caminar tenía un gran efecto en el pensamiento divergente, con un aumento promedio en la producción creativa de alrededor del 60%. En otro experimento, caminar afuera condujo a generar las analogías más novedosas y de mayor calidad, lo que sugiere que participar no solo en actividad física, sino también al aire libre, puede ayudar a las personas a encontrar ideas nuevas y creativas.