Ingredientes:
- Cartulina
- Compás y regla
- Marcadores o crayones en rojo, amarillo, verde y negro
- Agarrador metal de papel (“brad”)
Tiempo de preparación:
¡Receta para la diversión!
En la parte superior de una cartulina, escribe un título (o ayuda a un niño a escribirlo por si mismo) como "Ahora mismo, yo siento..." Usa la brújula para hacer un círculo grande en medio de la cartulina. Luego, utiliza la regla para dividir el círculo por la mitad y luego dividir cada una de las mitades por la mitad, para que tenga cuatro "secciones" divididas. Las "secciones" de color en el siguiente orden… verde, amarillo, naranja y rojo. En el segmento verde, escribe "Tranquila y feliz". En el amarillo, escribe "un poco molesto". En la sección naranja, "muy bravo". En el rojo, puedes escribir, "¡Voy a explotar!"
¡Se creativo! Que tu hijo utilice marcadores para añadir otras decoraciones en el cartel. Juntos, corten una flecha de 6" de cartulina negra y péguenlo a la cartulina con el sujetador de metal. La flecha debe fijarse en el centro de la parte plana del círculo. Pon el medidor de estado de ánimo en un lugar importante en el hogar, como la cocina o la sala de estar. De esta manera pueden constantemente poner sus sentimientos y luego hablar de ello. Invita a tu niño a prestar atención a cómo se siente y a hablar de ello. Con suerte, vas a tener muchos felices días venideros, y sino una manera creativa de conversar sobre las emociones.