Ayudar a Procesar y Expresar Emociones
Imagina un mundo donde los niños puedan comer galletas en el desayuno o que sea libre de temidas arañas. La magia del juego le da a los niños el poder de eliminar cosas cuando crean escenarios que los asustan y les permiten actuar en forma segura en circunstancias en que de otro modo está prohibido.
Es la manera de los niños de crear mundos imaginarios, personajes y tramas que coincidan con su estado emocional, ayudándoles a aprender a expresar y regular sus sentimientos. A través del juego, los niños aprenden a lidiar con sus emociones a medida que actúan para hacer frente al miedo, la frustración, la ira y la agresión en una situación que controlan. También es una oportunidad para que practiquen la empatía y la comprensión.
Además, al dar a los niños un sentido de logro y satisfacción, el juego puede ayudarlos a construir la confianza en sí mismo y la auto-percepción.
Darle a los niños un lugar para expresar sus emociones ¡ese es el valor de jugar!